Estudiar y hablar sobre el Yoga en general es una tarea compleja desde su inicio, ya que su propio origen es anterior a los primeros registros que podemos encontrar. Hablar sobre su origen es como intentar explicar el origen de la humanidad.
Además, la doctrina y la práctica varían de una escuela a otra y de un maestro a otro.
No obstante, el Yoga existe por sí mismo, y es intrínseco al ser humano y su anhelo de conocer la Verdad. Es vivencial y experimental, además de estar respaldado por siglos y siglos de enseñanzas y de ciencia.
Aunque se cambien algunos de sus contenidos, a lo largo de la historia, la esencia del Yoga sigue siendo la misma. El mensaje, y la intención del primer yogui fue verdadero y auténtico para sus discípulos, y a través de las generaciones sigue siendo genuino, hasta llegar a nuestros tiempos, como cuando cualquiera de las profesoras de este maravilloso equipo de Yogimi, nos sentamos en nuestra esterilla de yoga y damos la clase poniendo nuestro corazón en la transmisión de esa enseñanza para que llegue a ti, que nos sigues al otro lado de la pantalla, en esa cadena mágica de transmisión de las enseñanzas, uniendo el pasado con el presente, uniéndonos en la práctica de esta disciplina.
Todo esto justifica que hablemos del yoga no como una doctrina o una religión, sino más bien como una multitradición cultural y espiritual, que integra diversas corrientes, enfoques y aplicaciones. En este sentido, se habla de distintas formas o sendas del yoga.
Origen del Hatha Yoga
Tras muchos siglos de considerar la meditación como el centro de la práctica yóguica, a partir del siglo VI d.C., algunos yoguis, influidos por la alquimia y la medicina tradicional india, empezaron a descubrir el potencial del cuerpo y del trabajo con las energías sutiles. Es la tradición llamada tantra o tantrismo. Los yoguis del Tantra fueron los primeros que propusieron hacer que el cuerpo fuese instrumento necesario para el desarrollo espiritual, en lugar de su rechazo o negación con la que se había vivido hasta entonces. Descubrieron a través de la experiencia, que practicar Asanas y Pranayama (posturas y ejercicios de respiración) de manera consciente y ritual, aportaba grandes resultados espirituales.
Se reivindica el cuerpo como templo del alma y vehículo de evolución.
El término Hatha está formado por Ha (que significa sol) y Tha (que significa luna). Se trabaja para la armonización y equilibrio de la energía, que se expresa como una unión entre los opuestos: lo femenino y lo masculino, el Sol y la Luna, el cuerpo y la mente, lo dinámico y lo estático, la consciencia y la energía, Shiva y Shakti.
El tratado más antiguo que hace referencia al hatha yoga, es el Hatha Yoga Pradipika, del siglo XV. En él se describen las técnicas básicas: las posturas (Asanas), las técnicas de limpieza del cuerpo físico (Kriyas o Sat Karmas), ejercicios de respiración (Pranayama), contracciones musculares (Bandhas), visualizaciones y meditación.
¿Qué es hatha yoga y para qué sirve?
Entendemos Hatha Yoga como un conjunto de técnicas y herramientas que utilizan el cuerpo para desarrollar la consciencia, el conocimiento de uno mismo y la propia superación. Es ésta la práctica que ha llegado a occidente,la que mayormente practicamos en la era moderna.
Es un método para desarrollar la conciencia de sí mismo, y que sirve precisamente para evolucionar en ese camino de crecimiento y entendimiento. Una disciplina que nos ayuda a conectar con nuestro cuerpo, con nuestro sentir y con nuestros pensamientos, nos ayuda a traer equilibrio y consciencia, y nos permite liberar bloqueos y resistencias que impiden que sigamos avanzando. Una disciplina que nos sirve para purificar el cuerpo físico, traer equilibrio al cuerpo energético y al emocional. Unión y equilibrio del cuerpo, mente y espíritu.
El Hatha Yoga puede ser practicado por cualquier persona, independientemente de su edad, religión, sexo o condición física. Uno de los primeros textos que hablan de hatha yoga hace mención a esta universalidad de la práctica:
“No importa si se es joven o viejo, ni siquiera si se está enfermo o débil, todo el mundo puede comenzar a hacer Yoga” 1, 64 Hatha Yoga Pradipika
Estilos de Hatha Yoga
- Iyengar, donde se pone más énfasis en la perfecta alineación de cada asana
- Sivananda, donde se prioriza la cualidad energética de las posturas, así como los ejercicios respiratorios y los mantras. Manteniendo siempre la misma estructura.
- Ashtanga, la práctica más atlética y dinámica de Yoga, con series en las que se sincroniza la respiración con el movimiento entre las diferentes posturas, algunas muy exigentes. De aquí han nacido estilos como Vinyasa Yoga, Power o Rocket, con secuencias libres.
- Bikram, o “Hot Yoga”, una serie de 26 posturas que se practican en una sala a unos 40 grados.
- Así como otros muchos otros como Kundalini, Restaurativo, Anusara, Yin Yoga, Viniyoga, Aéreo, Terapéutico…
Resaltar aquí que Hatha Yoga suele usarse para designar el estilo en el que se mantienen las posturas en estático durante un tiempo determinado.
Si te apetece saber más acerca de los tipos de yoga puedes seguir leyendo el artículo: Tipos de Yoga.
¿Qué diferencia hay entre yoga y hatha yoga?
El Yoga es la disciplina física, mental y espiritual que se originó en la India antigua, cuyo objetivo último es la realización del máximo potencial del ser humano. Es la filosofía completa que engloba todos los caminos y vías para llegar al conocimiento profundo y la autorrealización del Ser. El Hatha Yoga es sólo una de esas vías; la que utiliza el cuerpo físico, con técnicas de trabajo corporal, respiraciones y relajación.
Características del Hatha Yoga
El Yoga es un camino que se debe recorrer con pasos cortos pero firmes, cultivando la paciencia y el respeto hacia uno mismo y hacia los demás.
Una clase básica de Hatha Yoga debe integrar:
- Posturas físicas (asanas)
- Ejercicios respiratorios (pranayamas)
- Atención plena o minduflness, un trabajo o conciencia interior.
- Relajación
- Meditación, ya sea en movimiento o en quietud.
El Hatha Yoga se suele practicar en una esterilla de yoga antideslizante, con ropa cómoda.
Lo ideal es hacerlo en una ambiente tranquilo, al aire libre o en una habitación con buena ventilación.
Pueden utilizarse también soportes o “props”, para ajustar las posturas, acomodar y facilitar apoyo; tales como cinturón, bloques de yoga, cojín de meditación o zafus, sillas…
Beneficios del Hatha Yoga
La evidencia científica es muy extensa, y cada día sigue creciendo, con cantidad de estudios e investigaciones que reafirman rigurosamente las excelencias del yoga y la meditación. Algunos de los beneficios son:
- Disminuye la ansiedad, la fatiga y el estrés.
- Aumenta la sensación de felicidad, mejora el humor y la autoestima.
- Mejora la memoria y el aprendizaje, al trabajar en la concentración.
- Fortalece los músculos, aumenta la capacidad ósea, y mejora la salud de las articulaciones.
- Aporta flexibilidad. Y esto se refleja tanto en la elasticidad muscular como en la mental
- Aumenta la capacidad pulmonar y respiratoria
- Mejora la salud cardiovascular reduciendo los infartos, ayuda a reducir la presión arterial y mejorar la circulación sanguínea
- Fortalece el sistema inmune
- Estimula la producción y equilibrio hormonal
- Mejora la digestión y la eliminación de toxinas del cuerpo a través de la activación del sistema linfático y la estimulación del sistema digestivo
Puedes leer más sobre la eliminación de toxinas y Detox aquí → Yoga Detox
Posturas del hatha yoga
Encontramos una gran variedad de posturas, desde las más tradicionales hasta todo lo que se va incorporando desde las disciplinas más modernas de estudio del cuerpo. Te dejamos aquí 3 de las más comunes:
Bhujangasana
Postura de la Cobra: es una asana de extensión básica que se enseña en las primeras clases de yoga y que forma parte del conjunto de asanas del Saludo al Sol. Fortalece los músculos de la espalda, los hombros y el cuello. También ayuda a mejorar la postura y la respiración.
Las extensiones aportan energía, abren el corazón y compensan el efecto de las asanas de flexión, como la pinza sentado o paschimottanasana.
Paschimottanasana
La conocemos normalmente por postura de la Pinza, aunque su traducción literal es “Flexión o estiramiento profundo hacia delante”. Permite el estiramiento de los músculos de la cara posterior de las piernas, así como de las caderas.
Las flexiones hacia delante son posturas de yoga que favorecen la relajación y la introspección. Ayudan a relajar el sistema nervioso, mejorar la digestión y la circulación sanguínea.
Es una de las 15 poses descritas en el texto yóguico clásico The Hatha Yoga Pradipika, y es común en prácticamente todos los estilos de yoga
Trikonasana
El nombre completo es Uttihita Trikonasana, y significa postura del Triángulo extendido. Es una flexión lateral de pie, que estira los músculos de las piernas y la columna vertebral, mientras se fortalece el core. Ayuda a mejorar la digestión y la circulación. Es muy buena para potenciar la energía y contrarrestar largos periodos sentado.
Es otra de las más habituales y también común a casi todos los tipos de yoga.
Es importante realizar todas las asanas con precaución, y ajustarlas según las necesidades individuales.
Clase de Hatha Yoga
Te invitamos a probar esta clase de nuestro canal y a suscribirte en nuestra newsletter, así recibirás tu calendario semanal de clases de yoga gratis.
Conclusión
Nos sentimos afortunadas de recibir todo este legado de enseñanzas y sabiduría, y poder compartirlo contigo.
Nos vemos en la esterilla
Namaste
