Es increíble la cantidad de tipos de yoga que se practican hoy en día, si bien siempre están los estilos más populares, prácticamente la mayoría de yoguis y yoguinis no practicamos más de dos o tres de ellos, algo que ya está genial, ¿no te parece? En este post vamos a hablarte de 16 tipos de yoga diferentes para que tengas una visión general.
Esta gran variedad es una de las grandes ventajas del yoga que otras disciplinas quizá no ofrecen a sus practicantes. El hecho de que existan tantos tipos o estilos, te facilita que puedas elegir el que más se adapte a tus necesidades, gustos o limitaciones. Y, precisamente, junto a las grandes bondades que proporciona su práctica en la mejora de la salud. Esa cantidad de variantes es una de las características que convierte al yoga en una práctica cada vez más extendida y que se está convirtiendo en casi esencial para incrementar nuestro bienestar en el día a día.
Es cierto que, con la pandemia Covid 19 hubo un gran despertar generalizado en la población mundial respecto al yoga, debido a sus grandes beneficios para aquietar la mente, cuidar el cuerpo, mejorar la salud y cultivar el espíritu. Sin duda, el ritmo de vida actual desenfrenado en el que nos vemos inmersas la gran mayoría de personas, las exigencias del trabajo y las responsabilidades familiares y sociales que casi nos arrastran, son la punta de lanza para que también busquemos formas de cuidarnos más amables y que trabajen para nuestro beneficio de forma amorosa y, sobre todo, integral sobre las tres preciosas partes que nos constituyen: cuerpo, mente y espíritu.
En una primera clasificación, tenemos los 5 grupos principales de yoga:
- Hatha: yoga de las posturas físicas.
- Raja: yoga mental o de interiorización.
- Karma: yoga de la acción consciente.
- Bhakti: yoga de la devoción espiritual.
- Jñana: yoga del conocimiento y la sabiduría.
A partir de estos, han surgido numerosas variaciones, de las cuales muchas te serán familiares. Se diferencian entre sí, no solo por la estructura de sus sesiones sino también por el nivel de movimiento del cuerpo, la intensidad de los ejercicios, la exigencia física para ejecutarlos e, incluso, por el tipo de material que se utiliza en cada una de ellas.
Y para que veas y puedas indagar, elegir y empezar a practicar el yoga que más encaje en tu esquema personal vital, desde Yogimi te vamos a contar en qué consisten algunos de los tipos de yoga más destacados en la actualidad:
01. Yoga Hatha
Corado por los expertos, la base del resto de estilos de yoga, hatha es también uno de los más populares y practicados. El hatha yoga Consiste en un yoga tranquilo en el que cada asana de hace, se mantiene y se deshace con cierta lentitud para lograr profundizar en el estiramiento muscular, lo que, a su vez, ayuda a calmar tu sistema nervioso, te invita a una concentración más profunda y a interiorizarte mentalmente. Se trabajan asanas básicas, pranayamas (respiraciones), bandhas (cierres energéticos) y mudras (asanas de manos). Es un estilo ideal para iniciarse en la práctica de yoga.
Se gana flexibilidad y fuerza en músculos y articulaciones, a la vez que se aprende a manejar la respiración para controlar el estrés y lograr relajarte. Para practicarlo debes emplear una esterilla de yoga, soportes o bloques y cinturón de yoga
02. Yoga Nidra
Conocido como el “yoga del sueño”, no se trata de un yoga para dormirte durante su práctica sino que te va ayudar a conciliar el sueño y lograr un descanso mucho más intenso. Algunos expertos afirman que una hora de nidra yoga puede lograr un descanso mental y físico equivalente a 5 horas de sueño.
Postura ecuestre (Ashwa Sanchalanasana), con brazos al cielo
Creado por Swami Satyananda Saraswati, yoga nidra es una técnica simple pero profunda, que este adaptó de la antigua práctica tántrica de nyasa. Se trata de un yoga pasivo que se realiza siempre en savasana y alcanza un estado de concentración y meditativo muy profundo, sin perder la consciencia (sueño consciente).
Para practicarlo, necesitas material básico: una esterilla de yoga, una manta o toalla para cubrirte y no enfriarte, y puedes usar también una almohadilla para los ojos y un cojín para el cuello o para acomodar las rodillas. En este estilo de yoga, tiene gran importancia tu “sankalpa” (intención) al que dirigirás cada práctica, y cada sesión se inicia en postura de meditación recitando el mantra Shanti:
03. Yoga Bikram
Es un estilo de yoga que se practica en una sala cerrada y en condiciones de temperatura ambiental (40-42ºC). En yoga bikram se sigue una secuencia concreta de asanas, compuesta por 26 posturas. El objetivo de mantener esas condiciones para su práctica es lograr que los músculos se mantengan templados, blandos y más flexibles para la ejecución de cada asana.
No es un yoga muy exigente y puede practicarlo cualquier persona que sea capaz de adaptarse y mantenerse en esas condiciones durante la sesión sin hidratarse, ya que los profesores normalmente no permiten a sus alumnos parar para beber. El yoga bikram ayuda fundamentalmente a eliminar toxinas mediante la sudoración, tonificar la musculatura y perder peso. Te puede interesar leer: ¿El Yoga Adelgaza?
Postura del Guerrero 2
04. Yoga Vinyasa
El Vinyasa Yoga, también llamado flow yoga, es un yoga activo y dinámico que fluye con el movimiento de una a otra asana, mientras se acompasa cada movimiento con una respiración controlada (punto clave de este estilo de yoga). Su práctica incluye pequeñas meditaciones, y distintas secuencias de asanas (vinyasas) como saludos al sol, planchas, rotaciones y también inversiones e inclinaciones, flexiones, torsiones, extensiones de distintas partes del cuerpo.
Conforme vayas evolucionando en tu práctica, irás incrementando el ritmo respiratorio y, con cada inhalación y exhalación, también el ritmo de la secuencia de asanas. El control del movimiento con la respiración logra que profundices en la concentración siendo fundamental la consciencia de que se están recibiendo los beneficios de cada una de las posturas. Es un estilo de yoga bastante exigente a nivel físico y de los más indicados si lo que deseas es tonificar musculatura.
Practica una clase de vinyasa yoga con Patry Montero:
05. Yoga Kundalini
El yoga de la energía (kundalini). En este estilo de yoga se combinan asanas, respiración, meditaciones y canto de mantras para meditar con el objetivo es desbloquear la energía kundalini que se ubica en la base de nuestra columna, y mantenerte en una elevada vibración que logre tu equilibrio energético físico, mental y emocional.
Las asanas que se practican en yoga kundalini proceden de yoga hatha (aunque no se usan todas) y las respiraciones más presentes son la respiración profunda (circular) y la respiración de fuego. Ambas contribuyen a aumentar tu nivel de energía.
La meditación es importante en este estilo de yoga para eliminar de la mente todo lo que ya no sirve y asentarla en la calma. El Yoga kundalini puede ser practicado por cualquier persona, si bien es cierto que las respiraciones empleadas pueden no ser para todos los públicos pues requieren de cierto nivel de entrenamiento y bajo la supervisión de un profesional que, para iniciarte, te sepa guiar correctamente.
Las asanas se realizan en secuencia de asanas determinada y con una intención energética concreta, de manera que se eligen aquellas de energía afín para producir el efecto buscado.. Este yoga puedes practicarlo tan solo con una esterilla de yoga y un zafu de mi meditación.
06. Yoga Ashtanga
Este estilo de yoga, basado en los yoga sutras de Patanjali, es un estilo muy dinámico, intenso y exigente en el que se combinan posturas, movimientos de respiración y meditación. La respiración principal utilizada es la respiración Ujjayi (inhalando y exhalando mediante la constricción de la glotis para alargar ambas fases de la respiración y hacerla más lenta) además del empleo de bandhas y dristis (concentración de la mirada en puntos concretos).
Postura Marichyasana I
El ashtanga yoga es considerado como uno de los estilos de yoga más completos, lo que lo ha llevado a convertirse en uno de los más practicados en Occidente. Existen varias series de asanas (primera, intermedia y avanzada A, B, C y D) que se ejecutan siempre en un mismo orden. En este estilo, se suele practicar de forma independiente y el profesor ajustará a los alumnos para pasar a siguientes posturas. Como material imprescindible para practicar ashtanga está la esterilla de yoga.
07. Yoga Iyengar
El yoga iyengar deriva del yoga hatha y se enfoca sobre todo en la alineación el cuerpo y en conseguir la postura correcta. Por eso, no se suelen practicar muchas asanas en una sesión de yoga iyengar, ya que parte del tiempo se dedica a alinear correctamente la postura. Es considerado como un yoga más estático. Además de lo básico (esterilla), en iyengar se emplean todo tipo de accesorios para yoga para facilitar la correcta alineación de la postura, y esto consigue que su realización sea posible para cualquier persona que desee practicarlo.
Como beneficios del yoga iyengar están la mejora de la postura corporal, la tonificación del cuerpo y la reducción del estrés, además, calma los dolores de espalda.
08. Yoga Yin
El yoga yin se está convirtiendo en uno de los más populares en la actualidad, ya que reporta numerosos beneficios y su práctica es lenta (es un yoga pasivo) y accesible para casi todo el mundo. Deriva del yoga hatha y está compuesto por 23 posturas, 7 de ellas arquetípicas y el resto variantes de estas, y que pueden agruparse en: posturas de suelo, de brazos, de columna y de rebound.
Se practica manteniendo cada una de ellas durante un tiempo determinado que varía entre 2 y 5 minutos o, en casos avanzados, llegando hasta los 7 u 8 minutos. Mientras se mantiene cada postura, se relajan todos los músculos dejando que la fuerza de la gravedad actúe sobre nuestro cuerpo.
En este tipo de yoga se trabaja el tejido fascial más profundo (fundas o membranas que envuelven todas las estructuras corporales), y logra un mayor estiramiento cuanto más tiempo de permanencia se mantenga en la postura, lo que ayuda a ganar gradualmente mayor rango de movimiento en las articulaciones. A su vez, el yoga yin induce a un estado de meditación y calma que conseguirá también la relajación de la mente.
Es un yoga ideal para cualquier practicante, y muy recomendado si padeces dolor de espalda o de caderas. Yin es la energía opuesta y complementaria del yang, y se refiere a la energía femenina, la oscuridad, la calma, la lentitud, la suavidad, y se asocia a elementos como tierra, agua, noche y luna. Se practica sobre esterilla y se emplean apoyos, bloques, mantas, cojines, etc.
Practica una clase de yoga yin con nosotros:
09. Yoga Bhakti
Es el yoga de la devoción, también conocido como el “yoga del amor”. Se trata de un yoga tremendamente espiritual. La devoción en yoga es el camino más puro del amor, y esta puede ser por una deidad o, si no eres una persona religiosa, devoción por un maestro espiritual, por un mentor, una idea, una experiencia, etc.
El Bhakti Yoga puede practicarlo cualquier persona. Se considera el camino yóguico más fácil de dominar y el método más directo para experimentar la unión entre mente, cuerpo y espíritu. Mientras que Hatha Yoga requiere de un cuerpo fuerte y flexible, Raja Yoga de una mente disciplinada y concentrada, y Jñana Yoga de un intelecto agudo, el único requisito para Bhakti Yoga es tener un corazón abierto y amoroso. No hace gran énfasis en asanas ni en pranayamas, sino más bien en actos de culto, de devoción y de servicio que realiza mediante meditaciones internas y japas (repetición de mantras).
10. Yoga Integral
Es conocido como yoga purna (término sánscrito que significa “completo”) y también se le conoce como el “yoga que cura”. El yoga integral aúna varios estilos de yoga y, además de asanas de yoga, se realizan pranayamas, meditaciones, kriyas (técnicas de saneamiento), una alimentación saludable y equilibrada y la práctica de la filosofía del yoga tradicional.
Su objetivo es fortalecer y purificar el cuerpo, la evolución y transformación total del ser, mediante la mezcla de lo físico, lo mental, lo intelectual y lo espiritual. No se basa solo en la realización de asanas sino también en la integración del yoga en todas las áreas de la vida, así que el yoga integral se practica y también debe estudiarse. Tiene multitud de beneficios si logras integrarlo hasta convertirlo en tu forma de vida.
En cuanto a la alimentación, sugiere el vegetarianismo, incentivando el respeto por los animales y el cuidado del medio ambiente. Las asanas se realizan de forma fluida y suave, sin forzar y centrándose en la alineación.
11. Yoga Oncológico
Se trata de un yoga adaptado a las necesidades y limitaciones de las personas con cáncer. Su práctica ayuda a los pacientes a eliminar toxinas por los tratamientos, a reducir el dolor, a reforzar su sistema inmunitario, a controlar emociones como la ansiedad y el miedo, y a crear redes de apoyo, al conocer a otras personas que pasan por situaciones similares, y que les son de gran ayuda durante el proceso de la enfermedad.
Las asanas se practican de forma suave y amable con el cuerpo, pero sin dejar de obtener sus beneficios. Se emplean los materiales básicos de yoga además de todo tipo de soportes, y props, además de sillas para hacer las asanas en posición sentada o apoyada sobre ella. Está comprobado que la práctica de yoga ayuda a los pacientes de cáncer, además de reforzar su autoestima ya que es una forma de pasar a ser parte activa en el proceso de su enfermedad y de su recuperación. Puede practicarse desde el diagnóstico, durante y post tratamiento.
Puedes leer un testimonio de una alumna aquí.
12. Yoga Restaurativo
Proviene del yoga iyengar y es un yoga de tipo pasivo que consiste en utilizar diferentes apoyos y ayudas para poder llegar a las posturas de forma fácil y que estas te proporcionen relajación. Las posturas se adaptan a las condiciones físicas del practicante y no al revés, por lo que es un yoga que puede ser practicado por cualquier persona ya que, por encima de lograr estirar o activar el cuerpo, se persigue calmar y relajar la mente y el cuerpo.
A menudo se confunde el yoga restaurativo con el yin yoga, pero no son lo mismo. El yin yoga produce un estrés suave sobre los músculos que crea cambios en el tejido conectivo logrando “engrasar” las articulaciones para aumentar el rango de movimiento, mientras que el yoga restaurativo lo que persigue es sanar el cuerpo restaurándolo mediante la relajación en las posturas.
Este estilo de yoga suele emplear más apoyos que el yin yoga (cinturones, mantas, bloques, bolsters, cojines…) y se emplean para reposar completamente el cuerpo en cada postura.
13. Yoga Fit
El yoga fit es un estilo de yoga adaptado al concepto de fitness moderno, y en él se reúnen distintos aspectos de fitness, pilates y yoga.
En cuanto a los aspectos del yoga, se trata de asanas dinámicas y enérgicas pero también respiración y meditación que complementan este estilo con ejercicios de cardio, sentadillas, abdominales, lagartijas y otros ejercicios tradicionales de fitness. Este estilo de yoga consigue poner en forma el cuerpo tonificando los músculos pero sin dejar de abarcar el todo, pues esta mezcla crea un flujo de ejercicios y asanas muy beneficioso para la mente, el cuerpo y mediante la meditación y la respiración también para el espíritu.
El consejo es comenzar siempre con baja intensidad e ir aumentando hasta cerrar con savasana (postura del cadáver). Necesitarás accesorios de yoga como: esterilla de yoga, cinturón de yoga, bloques de yoga, y no olvides una botella de agua o bebida isotónica que te hidrate.
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14. Yoga Terapeútico
Este es un tipo de yoga que busca fundamentalmente resolver, mejorar o aliviar determinadas afecciones musculares y otros problemas de salud o desequilibrios corporales como los relacionados con el dolor lumbar, las migrañas o, incluso, la digestión. Es, por tanto, un yoga cuyo objetivo es ayudarte a recuperar la salud física, mental, emocional y energética, además de prevenir nuevas dolencias y afecciones pero sin perder de vista los objetivos personales de cada practicante.
El yoga terapéutico es una modalidad mucho menos dinámica que otros estilos anteriores, son muy importantes la meditación y la relajación y también se debe adaptar a las capacidades físicas de cada persona, aunque, por supuesto, se trata de un yoga que puede practicarlo todo tipo de público, puede ser un estilo ideal para personas muy sedentarias, ya sea por su estilo de vida o por su trabajo, mujeres embarazadas y personas mayores.
15. Yoga Prenatal
Se trata de un estilo de yoga adaptado a la situación de embarazo de las mujeres, pero que, además de ayudarlas a relajarse y mantenerse en forma en su proceso de embarazo, también puede ayudarlas en la preparación para el parto e, incluso, promueve la salud de sus bebés.
Si estás embarazada, el yoga prenatal te ayudará a conocer a otras mujeres embarazadas, crear lazos con ellas y reducir el estrés de lo que supone convertirse en madre. Una típica clase de yoga prenatal suele estar compuesta por: respiración, estiramientos suaves, secuencia de asanas, enfriamiento y relajación. Una recomendación es que, antes de empezar a practicarlo, comentes con tu instructor cualquier detalle que deba saber y, también consultes previamente con tu médico para estar segura de que puedes practicarlo sin riesgos para ti y para tu bebé.
Si estás embarazada y quieres empezar a practicar yoga, te recomendamos los beneficios y precauciones que debes tener en cuenta a la hora de practicarlo. Además, te recomendamos que leas nuestros artículos: Posturas yoga para el primer trimestre, posturas yoga para el segundo trimestre y posturasyoga para el tercer trimestre.
16. Yoga Sivananda
El yoga sivananda es una de las modalidades de yoga más completas y místicas. Se basa en 12 posturas de hatha yoga que se practican de forma lenta, 5 principios y 4 caminos del yoga clásico (Yoga Raja, Yoga Jñana, Yoga Karma y Yogas Bhakti). Los 5 principios del yoga sivananda son:
- Practicar los ejercicios adecuados (sin perjuicio del cuerpo).
- Correcta respiración (rítmica y profunda).
- Relajación adecuada (savasana, para vaciar y calmar la mente).
- Dieta (fresca, natural y equilibrada, preferiblemente vegetariana).
- Pensamiento positivo y meditación (considerado el más importante de los principios).
No es un yoga que requiera de nivel de práctica concreto, pero sí que debes tener claro que no aprenderás solo posturas de yoga, sino que también dedicarás largo tiempo al bhakti (canto).
Conclusión
Ojalá que con esta lista de tipos de yoga, te hayas podido hacer una idea más concreta sobre lo que se trabaja en cada uno de ellos y puedas averiguar cuál es el que más te conviene practicar. Te invitamos a leer y desafiarte también con una clase de yoga en pareja. No es un tipo de yoga, pero si una clase diferente y muy especial que puedes realizar con un ser querido.
¿Qué te parece? ¿los conocías todos? ¿has encontrado ya el yoga que se ajuste a lo que buscas? ¡Cuéntanoslo!
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Namaste.
2 comments
Muchas gracias por este completo y esclarecedor artículo. 🙏
Saludos a todo el equipo yogimi amo sus prácticas
Tengo un 1 año practicando e visto que hay mucha variedad e información ami en lo personal me encantaría nos compartieran sobre como combinar meditación y los mudras para principiantes mamaste 🌞🙏les quiero mucho comunidad yogimi